Tuesday, June 26, 2012





             "LA SOMBRA DE LORENZO"                           

Cuando, a principio  del año 1504, Miguel Ángel se disponía a realizar una importante y muy original composición pictórica, el, cuadro destinado a la boda del rico florentino Agoló Dini, su carrera estaba en pleno esplendor. Su nombre ya aparecía mencionado en el libro De Escultura, publicado por Pomponeó Guárico en enero de 1504, y,
Aproximándose en aquel momento de los 30 años, aspiraba a trabajo de gran envergadura para los prelados romanos. En la misma época en dos bajo relieves, también de forma circular, el Tondo Pitti y el Tondo Tandeo, obras de una importancia en el ceno de su arte.
Pero, ¿quién era este extraordinario escultor que iniciaría, la más terrible destrucción de su propia vida forzado por el Papa Julio II? Ascanio Condivi, su alumno y biógrafo, escribía en la triste vida de Miguel Ángel…nacido Michel angeló, cuyo padre se llamaba Ludovico di Leonardo Buonarroti Simoni, hombre religioso, bueno y de costumbres más tradicionales; este último era podestá Chiusi y Caprese, en la región de Casen tino, tuvo este infante en 6 de Marzo de 1475, a las 4 de la mañana, un lunes. Sin embargo, el padre de Miguel Ángel se quedó poco tiempo en Caprese, pequeña aldea de la Toscana oriental. Algunos días después del nacimiento del niño, la familia deja la región para dirigirse A Florencia. El recién nacido
Fue entregado a una nodriza en Settignamo, una mujer cuyo marido y padre eran canteros.

Yo; Peter Bustamante no creo que el destino no tuvo nada que ver en esta mencionada técnica de su arte muerto, y cómo dijo Satinando estas son sus palabras. ¿Cómo no ver la mano del destino o, al menos, una extraordinaria coincidencia?
Un hombre que en la edad de 13 años, adolescente, que solo había recibido lecciones rudimentarias de gramática, declara querer dedicarse a la carrera artística. Desafiando la autoridad paterna, entra en el taller de florentino de Doménico y de Daniel Ghirlandaio, prestigiosos y confirmados pintores de la época. A pesar de las declaraciones de Miguel Ángel en su vejez, que llegará a negar su aprendizaje, este periodo de formación será determinante para su conocimiento del dibujo y de las grandes obras pictóricas del pasado.
De esta forma, el joven alumno puede afirmar su independencia respecto al ambiente familiar y demostrar su precoz madures artística. Se sentía, en realidad más atraído por la monumentalidad y por la fuerza de las obras de artistas que habían vivido más de un siglo antes, que por la exangüe melancolía de los pintores de moda, como Botticelli o Filipino Lappi. Es en esta época cuando acaece un desgraciado accidente, el puñetazo que Pietro Torrigiani, escultor como él, que no soportaba las burlas respecto a su trabajo le asestó, deformando su nariz de por vida.

En abril de 1492, con la muerte de Lorenzo de Médicis, se pasó una importante página de la historia florentina. Miguel Ángel, había obtenido su independencia estética, regresa al hogar familiar, donde aún realiza algunas esculturas. Profundiza sus conocimientos sobre la máquina humana realizando disecciones anatómicas. Esto estaba prohibido por la iglesia, pero el prior del Santo Espirito, para el que había esculpido un crucifijo en madera, le proporciona los cadáveres. En esta época, parece probable que el artista haya escuchado los ardientes sermones del dominico Savona rola, quien, después de haber deseado una república teocrática, morirá quemado en; la plaza de la Signaría de Florencia, en 1494, Bocarrota se encuentra en Bolonia, depende realiza algunos pequeños trabajos y donde se consagra, sobre todo en los grandes poetas en "Lengua vulgar, Dante, Bocací y Petrarca.
Es huésped del hidalgo Gianfrancesco Alorando.
Desde finales de 1496, y probablemente hasta principios de 1501, el joven escultor reside en Roma, donde realiza la obra maestra de este periodo: la Pipeta del Vaticano, encargo del cardenal francés Jean Bichares de Larguras, que marca un giro en su ya muy brillante carrera. El cardenal, embajador de Carlos VIII junto al papa Alejandro VI, deseaba una Pipeta para su propia capilla mortuoria en el viejo Saint-Pierre, en el interior de Sainte-Pétronila. La obra, acabada en 1499, suscita el entusiasmo y Miguel Ángel se encuentra, a los veinticuatro años, alzado a la cima de la gloria artística. Condivi anota: -Obtuvo, gracias a su obra, un gran renombre y consideración, de tal forma que se pensaba que no solamente era, con mucho, superior a todos sus contemporáneos, como también a aquellos que les habían precedido, y que, incluso, podía ser comparado a los escultores, de la antigüedad.

Queridos lectores él tiene también 9,"Poemas que más adelante los conocerán.
Que la paz este con todos ustedes.

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