‘EL MISTERIO DE LA VARILLA ADIVINADORA’
El fenómeno de la varilla adivinadora fue
conocido en la antigüedad y usado para propósitos prácticos y supersticiosos.
Los romanos usaron una vírgula furcata o ramita de avellano o sauce, en forma
de tenedor, para augurar sucesos. El girar de la ramita o el de la varilla
adivinadora significaba para ellos ciertos pronósticos. El uso de la varilla
adivinadora fue discutido en el trabajo De Re Metallica, escrito en el
año 1550 por G. Agricola. La Cosmographía Universallis de Sebastián Münters, en
el siglo XVI, menciona de nuevo su uso. Las descripciones indican que se usaba
para localizar venas metálicas en las aguas subterráneas. Los buscadores
alemanes en el siglo XV, usaron una varilla adivinadora para localizar
minerales en las regiones montañosas de su país. La historia cuenta que los
alemanes la llevaron a Inglaterra durante el reinado de la Reina Isabel.
La empleaban para ayudar a los mineros de Cornualles a localizar depósitos de
minerales. Se dice que los ingleses adjudicaban el nombre de rabdomante
a cualquiera que usara con éxito la varilla adivinadora.
Hoy en día, un rabdomante la usa principalmente
para localizar corrientes de aguas subterráneas. La práctica consiste en
sostener en las manos la ramita o varilla de avellano o sauce. Las manos agarran
la varilla en sus extremos. Cuando el rabdomante se acerca a una fuente de agua
o metal, la varilla se mueve vigorosamente en sus manos y el giro que hace
indica la presencia de agua o mineral. Parecería que el rabdomante está
haciendo algún esfuerzo físico o poniendo voluntad para darle giros a la
varilla. ¿Qué es lo que la ciencia académica dice con respecto a este fenómeno?
El físico común la abominaría como un engaño, truco o superstición. Tal científico,
sin embargo, está en realidad haciendo una conjetura sin previo estudio en
cuanto a la opinión de la ciencia sobre este fenómeno. El hecho reside en que
la ciencia ha hecho numerosas investigaciones serias acerca de los rabdomantes
y su uso de la varilla adivinadora en la localización de agua y metales. Un profesor inglés. Sir
W.F.Barrett, estaba convencido de que los giros no eran un acto de maldad o
engaño por parte del rabdomante. Después de un extenso análisis de todos los elementos que por lo menos eran
observables en esta práctica, dijo que el fenómeno se debía a automatismo-motor.
Esto significa “un acto reflejo” por parte del rabdomante, en respuesta a algún
estímulo sobre su mente.
Quiero que lean bien
las estupideces que nuestros antecesores nos dejaron, el profesor
Barrett consideró y esto es bastante significativo-que el poder del rabdomante “reside
debajo del nivel de percepción consciente”. Aparentemente esto indica que existía
un disturbio mental en el rabdomante, causado por un estímulo divino
desconocido, que causaba que la varilla se moviera en sus manos sin darse cuenta
de que él era la causa. Parece que esta investigación en particular estableció solamente
que no había engaño envuelto en ello. Resultados-(A) Alguna fuerza o energía se volvía un estímulo
solamente en ciertos individuos; -(B) La fuerza excitaba, en alguna forma la
mente subconsciente del rabdomante, por medio de la cual se generaba un poder
muscular. Y para terminar Ese mismo investigador además informó que sus descubrimientos revelaban que
los mejores rabdomantes habían sido “los analfabetos “en mis formas de
pensar este es un verdadero caso clínico para la ciencia de hoy en día.
Solamente les pido que vivan
en paz con ustedes mismos. Se recordarán de mi lo aseguro.
Peter Bustamante