‘CULTIVAR EL CORAJE’
¿Hay alguien entre nosotros
que, como los niños, no disfrutó y se deleitó escuchando historias de bravos héroes
de los viejos tiempos? Algunos de nosotros tuvieron el privilegio de pedir que
nuestra historia favorita fuera contada una y otra vez. ¡Qué hermosas visiones tuvimos
cada vez que escuchábamos cómo el joven David dio muerte al gigante Goliat! ¡Y
aquellos asombrosos e intrépidos caballeros del legendario Rey Arturo, que
siempre protegían el bien y destruían a los malhechores! Se nos enseñó, y lo creímos,
que cada uno debe ser honesto y decir la verdad; que siempre debemos proceder bien
y ser buenos; que debemos ser valientes y no temer, porque siempre algo nos
estaba observando, Ese era un mundo hermoso y feliz para los niños. ¿Qué ocurrió?
¿Eran mentiras las historias que nos
contaron? Los ideales y virtudes que nos enseñaron, ¿eran solamente mitos para
la confiada mente infantil? ¿Es el coraje solamente para aquellos que son
confiados e idealistas? ¿No es solamente más seguro sino más hábil no “verse
envueltos”? ¿Será el mundo más eventualmente mejor si nos protegemos y
permitimos que lo negativo y los malhechores dominen el mundo más y más? Si las
respuestas son “no”, ¿por qué es evidente que las fuerzas negativas en
el mundo están reinando y aumentando el poder? Para mí yo pienso que la
verdadera y simple respuesta está en la amenguante posesión de coraje por las
fuerzas positivas. De acuerdo con la ley de dualidad, siempre existirán, y debe
de existir las fuerzas tanto positivas como negativas. Lo positivo es, y
naturalmente debería ser, la fuerza agresiva y constructiva, pues cuando lo
positivo retroceda lo negativo llenará la brecha de acuerdo con la ley.
¿No parece incongruente para el virtuoso
coraje ser rotulado como agresión? El hecho es que debe ser, por la razón precisamente
declarada arriba. Quizás nuestras ideas equivocadas de esto sea la causa de
muchas condiciones infelices que ahora lamentamos en el mundo, sí así es quizás
los que me lean piensen que las neuronas de mi cabeza se exiliaron de ella. Además
la palabra coraje no significa ser feroces, brutales o hasta inconsiderados. Dejadme
ver si puedo pensar de donde viene la palabra coraje, creo que esa palabra
verdaderamente tiene su raíz en la palabra latina para corazón. Desde este
punto de vista, debería describirse como dedicación a eso que es correcto o
justo. Claro está, por consiguiente, uno coloca la causa a la que está dedicado
por encima de la seguridad personal, la ventaja personal, y la personal auto estimación.
¡Alguien debe!
Raramente alguien es negativo o malamente
inclinado por naturaleza. Nos convertimos en eso a través de la debilidad, la envidia,
el celo o la incontrolada: ‘Ambición de Poder’. En alguna parte dentro de
nosotros duerme la voz de consciencia y
puede ser despertada. Huir de los que tienen mentes negativas o permitirles
continuar dominando los demás, esclavizándolos y dándoles fe, y entre paréntesis
me encanta la palabra fe, jamás me la han presentado pero dicen que mueve las
montañas, y cuando no las mueve es que no tenias fe, y volviendo al caso lo que
si estoy seguro es que tarde o temprano, tendrán que enfrentar al David, de la historia,
¡eso es la ley! Reflexionen un momento en la historia. El verdadero coraje es
una extraña-casi mística-cualidad de la mente. No está basada en la razón y el cálculo.
No es indicativo de locura o atrevimiento. Ni es evidencia de vanidad o amor
propio. Algunas veces estos rasgos son mal comprendidos y designados como
coraje y hasta gratificado, pero esto no lo convierte ni lo transmuta en coraje.
La temeridad y la vanidad son motivadas por el ego dentro de nosotros. El
coraje se engendra desde afuera. Es motivado por la apelación y atracción por
la causa por la que está motivado. Y para terminar. ¡Él llamado mal puede ser
sojuzgado! ¡El apacible puede heredar la Tierra! Grandes culturas han venido y
se han ido. Hemos tenido edades doradas y por lo menos una era de obscuridad—y gentes
positivas y negativas han creado eso. La era por venir será creada por
nosotros. La mejor forma de comenzar es fomentando el coraje.
Traten de vivir en paz con
ustedes mismo.
Peter Bustamante